De manera inicial te agradecemos por estar considerando esta opción, pues nos estas ayudando a darle una nueva oportunidad de vida a pacientes que nos necesitan en este momento.

Primero que todo, es importante saber que la donación de sangre tanto en humanos como en todos los animales es un proceso que se debe realizar de manera voluntaria, conociendo sus beneficios y consecuencias, que conlleva una serie de pasos a realizar, teniendo en cuenta que entre mejor se lleven a cabo, mejor será su resultado.

Para que una mascota pueda donar debe encontrarse totalmente sano, sin antecedentes de salud importantes, con sus esquemas de vacunación y desparasitación vigentes y en un rango de edad de entre 1 y 7 años. En el caso de los perros, deben pesar más de 25 kilogramos y los gatos pesar más de 6 kilogramos, esto con el fin de que el volumen de sangre a extraer pueda ser compensado de manera segura por su cuerpo.

El proceso comienza con una revisión general, conocer a tu mascota, sus hábitos, antecedentes, gustos y demás datos que nos permitan saber un poco más de él o ella. Nos interesa saber que no haya tenido contacto con pulgas o garrapatas, ya que estos pueden transmitir enfermedades que lo imposibiliten de donar sangre a otro paciente. En este espacio brindaremos la información frente a los beneficios de donar sangre para tu mascota y los efectos que esto puede traer.

Una vez realizada esta breve revisión, es necesario conocer cómo se encuentra su organismo de manera interna, por lo cual se realiza una serie de exámenes sanguíneos para evaluar que su cuerpo se encuentre trabajando de una manera correcta. Aquí evaluaremos sus glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas, proteínas, entre otros factores importantes para conocer el estado del donante. Se debe realizar bajo esta misma muestra un examen para descartar cualquier tipo de parásito en la sangre que sea transmisible a otro paciente.

Si la mascota se encuentra con todos sus exámenes dentro de los parámetros y cumple con los requisitos anteriormente mencionados, será un candidato para donar sangre. 

Generalmente, se maneja bajo una corta sedación (10-15 minutos) para facilitar el manejo de los pacientes y hacer el proceso de una manera más rápida. En el caso de los perros, puede extraerse un volumen de hasta 500ml de sangre completa; en los gatos como máximo un volumen de 100ml. Su proceso de recuperación de la anestesia es bastante rápido, ya que no se encuentran bajo una anestesia prolongada.

Una vez colectada la unidad de sangre, se almacena y se tiene en reserva hasta que un paciente la requiera para complementar su tratamiento.

Finalmente, los donantes han dado su granito de arena para contribuir a un grupo de mascotas que requerían una trasfusión, dando a los médicos veterinarios una herramienta más para salvar vidas día a día.

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¡Recuerda que todas las mascotas, son de RAZA!