En tanto nosotros como nuestras mascotas, la sangre que corre por nuestros vasos sanguíneos (venas y arterias) es la encargada de que todo organismo funcione de una manera correcta y bajo una estricta armonía y orden natural.

La sangre es un tejido conectivo que transporta mas de los que creemos, pues contiene muchos componentes celulares, nutrientes y desechos. Todos esos componentes tienen una función específica, llevando a cabo tareas fundamentales para la preservación de la vida.

Algunos de sus principales componentes son:

• Glóbulos rojos

Los glóbulos rojos o eritrocitos ocupan la mayor proporción en la sangre, son los encargados del transporte del oxigeno a los diferentes lugares del cuerpo. 

• Glóbulos blancos

Los glóbulos blancos o leucocitos son el principal sistema de defensa del organismo frente a cualquier proceso infeccioso u otra enfermedad que llegue a presentarse. Se pueden dividir en granulocitos (neutrófilos, eosinófilos y basófilos), los monocitos y los linfocitos (células T y células B).

• Plaquetas

Estos restos citoplasmáticos se encargan de la reparación y cicatrización de los tejidos cuando ha sido afectado por alguna situación, generando cambios en su estructura y funcionalidad.

Los componentes mencionados anteriormente son los principales que podemos encontrar en la sangre y aquellos que permiten en muchos casos frente alguna enfermedad o de manera preventiva, evaluar el estado del organismo de la mascota. Existen muchos más elementos y sustancias presentes en este tejido, que permiten un análisis más completo.