Si tu peludo cojea en la mañana o luego de estar mucho tiempo acostado, significa que tiene una cojera en frío. Las cojeras en frío son aquellas que se observan en el inicio de la caminata y desaparecen luego de varios pasos y si tu peludo manifiesta esta clase de cojera es necesario que se haga una evaluación ortopédica, debido a que la cojera en frío es el resultado de enfermedades que afectan las articulaciones.

La principal alteración articular que causa la cojera en frío es la enfermedad degenerativa articular (artrosis) y por lo tanto se manifiesta con alta frecuencia en animales que son de avanzada edad o que desarrollaron la enfermedad en una etapa juvenil por predisposición genética y ambiental.

Otros animales que pueden manifestar la cojera en frío, son algunos que se encuentran en recuperación tras una lesión que de manera directa o indirecta genera un grado de afección articular, entre estas encontramos: recuperación posquirúrgica de procedimientos ortopédicos, tendinitis y lesiones musculares, como consecuencia parte de los animales que tuvo alguna de estas lesiones manifestará cojera en frío.

Si tu perro o gato ha mostrado esta cojera y no le encuentras explicación, es prudente que sea evaluado por un médico veterinario debido a que puede estar bajo un proceso patológico articular o muscular y su pronto diagnóstico permitirá evitar o empeorar la enfermedad degenerativa articular, Por otra parte si tu compañero peludo está en recuperación o superó  alguna de las lesiones mencionadas, no te preocupes porque la cojera en frío puede permanecer por un tiempo mientras se recuperan de las alteraciones secundarias.

¿Quieres saber más información sobre el cuidado de tu mascota desde la fisioterapia? Visita y suscríbete a nuestro blog.

¡Ellos no se rinden, nosotros tampoco!