Todo lo que debes saber sobre el distemper canino o moquillo

Durante el mes de junio y julio en la ciudad de Bogotá, se han reportado más de 178 casos positivos a distemper canino en las localidades de Ciudad Bolívar, Rafael Uribe, Engativá, Usme, Kennedy, Puente Aranda y San Cristóbal.

¿Qué es el distemper canino o moquillo?

Según la Secretaría de Ambiente de Bogotá, el distemper canino, también conocido como moquillo o enfermedad de Carré, es una enfermedad de origen viral de alta capacidad de transmisión. Si en los animales de compañía hay presencia de signos como secreciones nasales, oculares acuosos o con pus, diarrea, fiebre, decaimiento, pérdida de equilibrio, movilidad, deficiencias en músculos, movimientos involuntarios (tic), se debe consultar de inmediato al médico veterinario y evitar el contacto con otros perros.

Las variantes que circulan en Colombia tienen una alta potencialidad para causar enfermedades neurológicas, mucho más que las digestivas, el virus se puede transmitir a través de secreciones, aerosoles (gotículas de saliva expulsadas por ladridos o estornudos), orina y heces. También quedan excretando por orina el virus durante un tiempo y quedan con secuelas neurológicas, motoras, dificultades para comer, incluso quedan con dificultades cognitivas (agresivos y dificultad para socializar).

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Desde el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), se encuentran amplificando el genoma del virus para establecer si se está ante la presencia de una nueva cepa con condiciones atípicas y si la vacuna que tenemos actualmente puede ayudar a combatirla. La respuesta ante el virus y la capacidad que tiene cada individuo para responder, incluso estando vacunado, depende de sus condiciones específicas, como su esquema vacunal completo, no estar en contacto con demasiados perros que estén en confinamiento y la limpieza siempre que salga a algún parque.

¿Qué pasa si mi perro se contagia de moquillo?

Cuando el paciente entra en fase neurológica tiene una posibilidad de recuperación muy baja. Debe estar en hospitalización, aislamiento total, y, aun así, puede quedar con deficiencias en los músculos de la cara, tics, tienen problemas de equilibrio, o tienen lesiones en dientes, pulpejos y nariz.

¿Cómo puedo prevenir que mi perro se contagie?

• Vacunación

La vacunación es la herramienta más útil. Es importante hacer el refuerzo anual en animales adultos, e iniciar la vacunación a tiempo en los cachorros que son más vulnerables a este virus. La vacunación existente se produce con las cepas originales del virus y esta aumenta la tasa de protección para responder ante nuevas variantes. Sin embargo, es importante recordar que no hay vacunas perfectas, pero buscan la mayor tasa de protección posible.

En los cachorros la primovacunación debe iniciar a los 45 días, dependiendo de la vacuna de la madre, estos pueden desarrollar una buena capacidad de respuesta inmunológica. En perros adultos, de los que no se conoce su antecedente y pensando en todas las infecciones, se utiliza la pentavalente, pero esto se debe realizar bajo criterio médico. Todos deben vacunarse y tener su refuerzo anual en la fecha estipulada, por ejemplo, si el refuerzo anual es en diciembre de este año tiene protección hasta diciembre ya que la vacuna tiene una cobertura de un año, si su refuerzo anual esta a 3 o 8 días de aplicación si se puede adelantar la vacuna para prevenir el contacto con el virus.

• Evita el contacto

Evitar el contacto con otros perros si hay signos clínicos y, ante la presencia de estos, acudir al veterinario de confianza.

• Higiene de la mascota

Limpiar las patas y hocico de los perros al llegar del parque con pañitos húmedos de uso veterinario veterinarios.

• Limpieza

Limpiar las suelas de los zapatos y cambiarse de ropa, pues, aunque no se transmite a los humanos, si pueden ser transmisores indirectos.

¡Recuerda que todas las mascotas, son de RAZA!