Actualmente en el mundo veterinario se usan muchas herramientas y diferentes procesos para las distintas terapias de fisioterapia y rehabilitación para mascotas, ya que es el área que apoya diferentes tratamientos de diversas enfermedades.

A continuación, te contamos 6 casos donde tu perro o gato podría requerir de una consulta fisiátrica y del inicio de un proceso fisioterapéutico y/o de rehabilitación.

• Tras una lesión de tejidos blandos

Golpes, sobre extensiones, desgarros, heridas y otras lesiones que ocurren en tejidos como la piel, tendones, ligamentos y músculos, pueden ser abordados desde la fisiatría, gracias a que se busca desinflamar, reducir el dolor, cicatrizar y devolver la función este tipo de tejidos.

• Luego de una lesión o cirugía en los huesos o articulaciones

Golpes, fracturas, fisuras, inflamación, luxaciones, degeneración y otras lesiones que ocurren en los diferentes huesos y articulaciones del cuerpo reciben grandes beneficios de la fisioterapia, donde pueden acelerar su cicatrización, generar analgesia y, además, colaborar en las restauración de los tejidos circundantes.

• Si presenta sobrepeso

Para prevenir el sobrepeso es importante tener una rutina sana junto a nuestros animales, esto incluye, una correcta nutrición y adecuada actividad física, además gracias a diferentes ejercicios guiados por un fisioterapeuta promovemos el gasto energético, el fortalecimiento muscular y evitamos lesiones que pueden limitar la movilidad y promover el aumento de peso inadecuado.

• Si practica algún deporte

Deportes tales como el agility, canicross, atletismo, entre otros, toman cada vez más fuerza, pero pocos tutores saben que hay algunos factores importantes a tener en cuenta para mejorar el rendimiento de sus peluditos y evitar lesiones musculoesqueléticas en entrenamiento o competencias. Esto, gracias a la fisioterapia, puede ser correctamente guiado y supervisado.

• Cuando deja de moverse igual que antes

Debido al dolor que pueden generar algunas condiciones patológicas, sobre todo del sistema musculoesquelético, o a la edad, tanto perros como gatos pueden tener problemas para moverse y desplazarse. En fisiatría se abordan integralmente los problemas que pueden causar esta falta de movimiento, ayudando con el dolor, la inflamación, la falta de flexibilidad y oxigenación en tejidos, entre otros.

• Si pertenece a una raza predispuesta a enfermedades musculoesqueléticas

Es importante que preventivamente, si tienes un perro o gato de raza, investigues qué enfermedades suelen heredarse y afectar su salud a corto, mediano o largo plazo. Asiste a consulta fisiátrica si sabes o sospechas que tu perro o gato puede tener alguna enfermedad del sistema musculoesquelético, pues muchas veces cuando se dan los síntomas puede ser demasiado tarde para evitar que el problema se convierta en grave pudiendo haber sido diagnosticado a tiempo. 

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¡Ellos no se rinden,  nosotros tampoco!