Cada día nos enfrentamos a una de las más comunes enfermedades que pueden llegar a presentar los mininos de la casa y se trata de mycoplasma haemofelis. Una bacteria que se encuentra en la sangre y que puede enfermar a nuestra mascota en un periodo de tiempo muy largo, logrando llevarla a un estado comatoso de no tomar medidas pertinentes.

Como caso típico, la intención de la persona responsable, es ofrecerle una mayor cantidad de alimento o esperar a que la mascota engorde. Mycoplasma, la bacteria que se aloja en la sangre se encarga de absorber los nutrientes y replicarse en todas las células sanguíneas sin permitir que nuestra mascota mejore.

Es cuando llega a consulta la mascota requiriendo de cuidados hospitalarios.

Esto se puede prever si agendamos una consulta y se realiza oportunamente un chequeo de rutina con el fin de realizar una exploración completa y una anamnesis a la persona responsable con el fin de llegar a un diagnóstico y un tratamiento que puede variar dependiendo del estado en que se encuentre el paciente.

¿Pero cómo se contagia mi mascota?

Nuestro ser amado gatuno puede contagiarse de dos y hasta tres maneras. La más común, transmitida por pulgas por medio de picadura, algo muy difícil de controlar muchas veces.

También se ha logrado observar la transmisión de mycoplasma en peleas de gatos que suelen ocurrir muchas veces cuando se encuentran en el entorno callejero.

¿Cómo se diagnostica?

La detección se realiza por medio de diagnóstico laboratorio, con distintas técnicas que permiten la visualización de este agente en la sangre de nuestras mascotas.

Las técnicas de laboratorio se realizan en nuestras instalaciones y nos darán un resultado 100% específico para realizar un diagnóstico acertado y comenzar un tratamiento.

Así que no esperes más y si tienes dudas acerca de la salud de tu mascota acude inmediatamente para una revisión.

¡Recuerda que todas las mascotas, son de RAZA!